Errores comunes en el reemplazo de sellos hidráulicos y cómo evitarlos
Los sistemas hidráulicos requieren un correcto sellado para un funcionamiento óptimo y evitar fugas. Los sellos hidráulicos son elementos delicados que deben cambiarse de forma adecuada. Al reemplazarlos se cometen a menudo errores que acortan su vida útil. Veamos cuáles son y cómo prevenirlos.
Uno de los errores más frecuentes es no limpiar correctamente las superficies de acoplamiento. Los residuos de suciedad, polvo o rebabas pueden dañar el sello nuevo rápidamente. Es esencial limpiar meticulosamente con solvente las ranuras y alojamientos antes de instalar el nuevo sello. Verificar además que no queden rayaduras que afecten el ajuste.
Otro problema habitual es forzar el sello al insertarlo. Debemos deslizarlo suavemente en su alojamiento, sin golpearlo o presionarlo excesivamente. Si está muy ajustado puede dañarse. Es mejor crear una herramienta específica de inserción antes que intentar presionarlo con los dedos.
También se debe lubricar el sello antes de colocarlo, generalmente con el mismo fluido de trabajo del sistema. Insertarlo seco puede deteriorar los elementos de sellado, especialmente en sellos con elastómeros. Aplicar lubricante facilita un montaje seguro.
Un error que acorta la vida del sello es alinearlo incorrectamente. Debemos asegurarnos que quede centrado y completamente insertado en la ranura antes de accionar el equipo. Una alineación descentrada provoca sobrecalentamiento y desgaste en un solo lado.
Asimismo, es indispensable respetar las tolerancias del fabricante. Forzar un sello de medidas métricas en una cavidad en pulgadas, o al revés, deformará los elementos de sellado. Siempre debemos sustituir con un sello del mismo sistema de medidas.
También se debe montar con el lado correcto hacia el fluido a presión, de lo contrario el sello puede expulsarse súbitamente de la ranura. Hay que consultar las especificaciones técnicas para orientarlo según el diseño.
Otro descuido habitual es no verificar el estado de la contra-cara del eje o camisa. Si presenta ralladuras o imperfecciones severas, debemos rectificarla o cambiarla, de lo contrario dañará el nuevo sello.
No menos importante es aplicar la fuerza axial adecuada sobre el sello al momento del montaje. Una fuerza insuficiente puede provocar fugas, mientras que un exceso genera sobrecalentamiento. Se debe consultar y aplicar la precarga recomendada.
También se debe evitar activar el sistema hidráulico antes de que el sello alcance la temperatura de trabajo. El arranque en frío reduce la flexibilidad del elastómero, pudiendo ocasionar daños. Es mejor realizar un calentamiento gradual.
Por último, hay que tener precaución de no contaminar el sello luego de instalado. Sus caras de sellado son susceptibles a pequeñas partículas que pueden incorporarse durante el armado final y provocar fallas. Se debe operar con pulcritud hasta completar el montaje.
Como hemos visto, la sustitución de sellos hidráulicos parece sencilla pero requiere de cuidado y precisión. Evitar estos errores comunes permite aprovechar toda la vida útil de los sellos, evitando fugas y costosas interrupciones. Asesórese con los expertos para realizar un reemplazo seguro.
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